Buenos Aires o Baires como la llaman los Porteños, es una ciudad de 11 millones de habitantes grande y llena de contrastes. Hay mucho que ver y mucho que hacer.
Digo llena de contrastes porque partes de ella son muy modernas como estos edificios cerca de Puerto Madero, partes son del siglo XIX europeo y partes son del siglo XX norteamericano. Desafortunadamente Baires también tiene algunos de los peores tugurios suramericanos.
La última vez que estuve aquí (2004), puse casi 50 fotos de la ciudad y la región en este sitio. También pueden ver otras 8 fotos que tomé en1994. Esta vez sólo agregaré una cuantas vistas más de la ciudad..
Buenos Aires ha tenido un éxito extraordinario al convertir las viejas y deterioradas bodegas que bordean sus cuatro diques portuarios interiores en este moderno conjunto de restaurantes, boutiques, oficinas y apartamentos.
La imagen de la derecha muestra estas viejas bodegas antes de su restauración en los noventas. (Como es usual, el borde negro indica que ésta no es una de mis fotos)
Como pueden ver, el dique no. 4 de Puerto Madero anteriormente un desordenado embarcadero, ha renacido como un exclusivo ambiente con marina para los pocos privilegiados. Las oficinas de Telecom ocupan el edificio alto en la entrada del dique. La estructura con forma de velas cruzando la entrada es una súper discoteca y los diferentes edificios al otro lado del dique albergan oficinas, hoteles, restaurantes, tiendas lujosas y apartamentos.
La corbeta Uruguay, construida en Inglaterra en 1874 se conserva como un museo histórico en el dique no. 4. Jugó un papel en la afirmación de la soberanía de Argentina sobre parte de Tierra del Fuego pero la principal razón por la cual es famosa es el heroico rescate en 1903 de una expedición sueca atrapada en la plataforma de hielo de la Antártica.
La construcción siga adelante a un paso vigoroso por que exista una fuerte demanda de propiedad privada costosa no obstante las dificultades financieras del país. Pueden dar un vistazo al nuevo Hilton al otro lado de la entrada del dique no. 3.
Esta vista de 180 grados del dique no. 3 muestra el hotel Hilton, más construcción en curso, un puente peatonal futurista y otro barco museo. Hay dos diques más como estos más adelante.
La fragata Sarmiento construída en Inglaterra en 1898 sirvió como escuela de entrenamiento naval desde 1899 hasta 1949 circunnavegando el planeta 37 veces mientras mostraba la bandera Angentina y entrenaba cadetes.
Este recargado edificio alberga un centro comercial construído en 1896 en el estilo del "Au Bon Marché" en París y originalmente llamado con ese nombre.
(Como es usual, el borde negro indica que ésta no es una de mis fotos)
Ha tenido sus altibajos a través de los años y cambió su nombre por el de Galerías del Pacífico pero ahora es de nuevo uno de los mejores lugares en Baires para comprar artículos lujosos después de ser completamente restaurado en los noventas.
Ha sido declarado monumento histórico ya que es un recuerdo de los días mejores cuando Argentina era el país más próspero de Sur América y Buenos Aires su ciudad más elegante.
Abajo tenemos un primer plano del gran domo central y los techos de vidrio
que fueron considerados una maravilla en esa época.
Las áreas más o menos triangulares decoradas con círculos son llamadas "Albanegas" o "Enjutas", las vigas de acero que definen sus bordes son esenciales para la estructura pero las áreas que ellas generan son sólo consecuencias accidentales de la presencia de estas vigas. Estas áreas no tienen un propósito útil para la estructura y tampoco las decoraciones que llevan.
Stephen Jay Gould y otros biólogos evolucionistas han usado la metáfora de las "enjutas" (o "spandrels") para explicar cómo la selección natural que mejora la supervivencia y la propagación de nuestros genes puede accidentalmente producir aptitudes humanas y tendencias no relacionadas con la aptitud genética. En esta metáfora, la decoración en la enjuta, llamada por Gould una "exaptation", no tiene una utilidad estructural pero sin embargo contribuye al conjunto arquitectónico.
Menciono esto de pasada porque algunos neurólogos han presentado la hipótesis de que la propensión humana a creer en conceptos irracionales no probados es una "exaptation" de la valiosa habilidad evolutiva de los niños de absorber rápidamente los memes de los adultos. En otras palabras, nuestra tendencia a creer en seres sobrenaturales sin la más mínima evidencia, podría ser un subproducto accidental de nuestra valiosa habilidad evolutiva de imitar el comportamiento de nuestros padres sin detenernos a pensar por qué.
Abajo el domo de vidrio es un domo secundario, construído después de la Segunda Guerra Mundial con murales pintados por los mejores artistas del país en esa época.
Todavía más abajo, en el nivel del sótano esta fuente está rodeada de más almacenes y una zona de comidas.
Las Galerías Pacífico todavía son impresionantes de una manera nostálgica pese a su edad más que centenaria.
Buenos Aires tiene de todo para los compradores, desde lujosas boutiques internacionales hasta este mercado de las pulgas cerca de la estación de subte de Dorrego.
Me encanta curiosear en los mercados de las pulgas, no sólo para ver si puedo adquirir algo interesante sino también para observar a la gente que maneja estas tiendas.
Los comerciantes de los mercados de las pulgas son personas muy especiales en nuestra era de despilfarro consumismo. Tienen ojo para los hermosos objetos del pasado y los respetan.
Por haber restaurado una hacienda centenaria y haberla amoblado con muebles de época comparto su aprecio por el antiguo oficio experto.
El gran Teatro Colón construído entre 1889 y 1908 como una copia más grande de La Scala de Milán en el cenit de la prosperidad Argentina.
Con capacidad para 2500 personas, era en ese entonces el tercero más grande después de las casas de la ópera de París y Viena.
Aquí está otra vista del famoso Obelisco de Buenos Aires apenas a tres cuadras de mi apartamento.
Por ser la carne de res la especialidad del país, los restaurantes de parrilla al carbón varían desde los sencillos como éste hasta los establecimientos bastante elaborados donde la carne de res, de cordero y de chivito son asados al estilo gaucho en asadores verticales ubicados alrededor de un gran fuego de leña.
Aquà tenemos otra de las innumerables parrillas que pueden ver en las calles de Buenos Aires. ¡Si a ustedes les gusta la carne roja  tierna y sabrosa como a mÃ,  la tentación constante de atiborrarse  es irresistible!
Aquí está otra parrilla en un restaurante más lujoso. Tengan cuidado, los precios más altos y un equipo más moderno no significan que la carne sea mejor. Pregunten a sus amigos porteños, ellos sabrán donde encontrar la mejor carne.
Y si usted realmente quiere una gran comida turística, se puede asegurar de una buena presentación con todos los acompañamientos tradicionales en una parrilla abierta como ésta. Aquí se están asando cordero de la Patagonia y chivito.
También hay una variedad de bares para estar de pie desde simples puestos
de perros calientes hasta lugares más elegantes como éste donde
mi amigo Alberto está tratando de determinar cual es mejor con un expreso
a las dos de la mañana, la grappa italiana o la argentina.
Los argentinos son un pueblo orgulloso y casi no he vsito a nadie pidiendo limosna abiertamente. Hay otras formas de sobrevivir a los tiempos difíciles, como vender lápices o artefactos en el subte o entretener a la gente en las calles como lo está haciendo este caballero en la noche, con un traje que alguna vez estuvo de moda.
Los populares paseos comerciales del microcentro (Lavalle y Florida) son bastante tranquilos en la noche porque están bien patrullados por policías uniformados y vestidos de civil que usan estos prácticos mini vehículos para responder rápidamente a cualquier llamado.
Sin embargo, se recomienda tener cuidado de noche en las oscuras y desiertas calles laterales como en cualquier gran ciudad.
Los bailarines de tango por supuesto son comunes. Menos común es el que está a la derecha que nos brindó un tremendo show bailando con su marioneta.
Dos Charlie Chaplins seguro que atraen más atención y donaciones que uno solo.
Baires es una gran ciudad con once millones de habitantes lo suficientemente
grande como para incluir todo tipo de personas como estos dos travestis
sentados en la mesa junto a la mía en un lugar de comidas rápidas
que estaban complacidos de posar para mí cuando les pedí permiso
para tomarles la foto.
Este gitano era el maestro de todos los artistas callejeros.
Él tenía la mejor ubicación de la ciudad en la interseccción de dos paseos reservados para peatones, Lavalle y Florida, y la ocupaba casi todo el tiempo.
Era bastante bueno haciendo reir a la gente y tenía un repertorio tan amplio que sólo una vez lo ví haciendo la misma rutina dos veces.
Noté que había menos artistas callejeros que hace tres años. Siempre optimista, tomé ésto como una señal de que la economía está mejorando.