Acogida
Relatos
Principio
Anterior: Tanzania
|
Capital: Lilongwe
Idiomas: Inglés (oficial), Chichewa |
En 1891, los británicos tomaron las fértiles colinas alrededor del lago, al declarar el área como un protectorado llamado Nyassalandia. Los misionarios y plantadores de té llenaron el lugar y expropiaron las mejores tierras con todas las delicadezas formales de la ley colonial británica, así como lo habían hecho en tantos otros lugares alrededor del mundo. Como en los demás lugares, finalmente se tuvieron que ir y nació la República de Malawi en 1964 bajo el liderazgo del Doctor Hastings Kamazu Banda, quien se declaró a sí mismo "Presidente de por vida" en 1970. Banda dirigió Malawi como si fuera su propia casa, diciéndole a su gente hasta qué ponerse. De hecho, después de tres décadas de su dictadura, una tercera parte de la economía del país era controlada por su compañía privada llamada Press Holdings. La intensa presión internacional lo forzó a realizar elecciones reales en 1994 y tuvo que retirarse después de la clara victoria de Bakili Muluzi, quien inició un programa de privatizaciones y reformas para promover el crecimiento y controlar la inflación. ¡Ahora, los mochileros pueden visitar Malawi sin preocuparse de su vestimenta o su peinado! |
|
| CIA | ||
Vista del Lago Malawi desde las colinas de Livingstonia.
Llegué a la frontera de Malawi en la parte trasera de una bicicleta, al mismo tiempo que un grupo de 30 jóvenes británicos que viajaban en dos grandes camiones "Economic Overland". Realizamos los trámites juntos y me invitaron a unirme a ellos hasta la próxima parada, el bar Des & Bones Beach Bar en Chitimba al pie del acantilado Livingstonia.
Eran un buen grupo, me adoptaron y nos divertimos... Estos camiones Overland (por tierra), son una excelente forma de que los chicos experimenten aventuras y vean el mundo con un presupuesto mínimo. Este grupo se había juntado en Nairobi. Llevaban equipo para acampar y todo lo necesario para ser autosuficientes. Iban a pasar tres meses explorando Africa, antes de dispersarse en Ciudad del Cabo donde los camiones cargarían otro grupo para regresar a Nairobi. ¡Qué brillante idea!
Lo único que necesitaban era un lugar para colocar sus tiendas e instalar sus estufas de campo. Cada uno tenía sus obligaciones y según pude ver ninguno se esquivaba. Andy, el líder australiano de la caravana de 22 años, era un pensador que podía hablar toda la noche acerca de la verdad de la experiencia versus la farsa de las estructuras. No pude evitar estar de acuerdo con mucho de lo que decía.
Yo viajo con poco equipaje y no tenía una tienda así que renté esta choza en la playa por US$2 por noche. Pueden ver el tamaño de mi mochila que está a la par de la puerta. Fue excelente pasar un día de descanso en la playa sin hacer nada y viendo los preparativos para la fiesta nocturna.
Al segundo día, llegaron estos dos tipos en su Ford modelo T de 1917. Lo habían conducido desde Londres y !planeaban llevarlo alrededor del mundo¡ El siguiente trayecto después de Ciudad del Cabo, era India. Yo estaba encantado porque una vez tuve un Modelo T de 1924 en Ottawa cuando tenía su edad, hace mucho tiempo. ¡Qué fantástica aventura!
Los dos chicos del Modelo T y yo contribuimos con nuestra parte, y el grupo compró un cerdo vivo en un pueblo cercano. Mataron, escaldaron y limpiaron al animal en la playa, y estos locales lo asaron lentamente todo el día. Fue realmente una gran fiesta con cerdo asado, batata, ñame, elotes cocidos, mucha cerveza Malawi y pasteles de marihuana horneados por una de las chicas. !Wow!
Al siguiente día llegué hasta Mzuzu con ellos y me despedí afectuosamente. Quería ir hacia la Bahía Nakhata para viajar por el lago en buque de vapor, pero cambié de parecer y tomé un bus a Lilongwe porque nadie podía informarme cuándo vendría el barco.
En Lilongwe, me quedé en la Casa de Huéspedes del Ayuntamiento de la Ciudad cerca de la estación de buses en la parte antigua de la ciudad por US$3.60 la noche. Tenía un inmenso bar y era muy bullicioso, pero tenía un ambiente placentero y era limpio y seguro. Me gustó y me quedé por unos días. Esta es el área de mercado en la antigua ciudad donde compré dos cabezas de ébano hermosamente esculpidas. Las embarqué a casa y llegaron.
La nueva Lilongwe es tan limpia y moderna que parece un lugar extranjero en este ambiente que se parece un poco a Brasilia y Canberra. Tuve que ir allí para obtener la vista de tránsito que se requiere para cruzar el "Gun Run" hacia Zimbabwe a través del corredor de Tete en el territorio de Mozambique.
Este es un árbol baobab. Desde Lilongwe, viajé 8 horas en bus hacia Monkey Bay en la punta al sur del Lago Malawi. Luego, pasé una hora más en bus para llegar a Cabo McLear. ¡Qué pequeño es el mundo!, mi bus fue alcanzado por los dos camiones Overland que iban a la playa Golden Sands a unos kilómetros después de Cabo McLear.
Este tranquilo pueblo Africano, apenas empezaba a ganar popularidad con los mochileros cuando estuve allí en febrero de 1995.
Me encantó, tenía de todo; un excelente paisaje, una linda playa, personas locales amigables y hospitalarias, algunos, pero no muchos mochileros y precios sin competencia. Obtuve un amplio cuarto con dos camas por 10 Kwasha (65 centavos) ¡y la cerveza costaba únicamente cinco Kwasha!
La comida era mediocre, pero esto es igual en toda África. Me he dado cuenta que toma siglos de civilización para tomar conciencia que el acto de comer es una forma de arte en vez de algo necesario para la sobrevivencia. África posee muchas atracciones, pero desafortunadamente el placer del buen gusto no es una de ellas. En total, me pareció que la comida africana era blanda, insípida y nada inspiradora aunque a veces puede ser picante.
Habiendo dicho esto sobre la comida, Malawi, y especialmente Cabo McLear, es una esquina del planeta a la que espero regresar algún día. Preferiblemente con una linda chica...
Lilongwe es la capital, pero Blantyre es donde se encuentra la acción. Esta es el Ayuntamiento.
No es una gran ciudad, pero Malawi no es un gran país. Yo personalmente creo que si esta fuera la capital, los que toman las decisiones tendrían una mejor oportunidad de saber acerca de qué están tomando decisiones. La tendencia de los políticos y burócratas de aislarse en su torre de marfil, lejos de las torres de la realidad económica es universal, sólo vean a Washington, Ottawa, la Ciudad de Quebec y en manifestaciones más extremas de este aislamiento, Brasilia y Canberra.
En Blantyre, me quedé un par de días en Doogles, una casa de huéspedes administrada por el Ex-Sudafricano Dave Bradshaw, donde me encontré a varios viajeros interesantes, Bob y Dean, dos australianos que tenían buena marihuana, Tom O´Brien, que enseñaba ciencias en una escuela secundaria para el Cuerpo de Paz y Barbara Lotz, que quería ir a Harare con su amiga Suzanne Hvaling.
Yo también iba a Harare, y los tres tuvimos la buena suerte que Dave, que iba allí en viaje de negocios, ofreció llevarnos con él. Fue un largo viaje en automóvil, partimos a las 7 a.m. y llegamos a las 9 p.m., pero fue muy interesante. En esas 14 horas, Dave compartió con nosotros abundante información y comprensión acerca de los problemas y las esperanzas de África. Aquí nos acercamos a la frontera entre Malawi y Mozambique, la cual tenemos que curzar para llegar a Harare en Zimbabwe.
