Las regiones polares ártica y antártica podrían verse parecidas desde el espacio exterior pero son fundamentalmente diferentes por esa razón. La capa de hielo del norte, a la izquierda, flota en el mar Ártico y tiene sólo tiene 3 o 4 metros de espesor mientras que la capa de hielo de la Antártida, a la derecha, está congelada completamente hasta la base de tierra que la sostiene. Esto ha permitido al hielo acumularse hasta por más de 4000 metros de espesor en algunos lugares. La Antártida es en consecuencia mucho más fría que el Ártico. Tiene el 90% de todo el hielo de la tierra. Si todo ese hielo se derritiera, los océanos crecerían unos 80 metros inundando todos los puertos marítimos del mundo. Eso no es en absoluto comparable a la delgada capa de hielo permanente que flota en el Ártico.

Las capas de hielo polar fueron formadas sólo unos 20 millones de años atrás lo cual es relativamente reciente considerando la edad de la tierra de 4.5 billones de años aproximadamente. Esto significa que la estructura y composición del continente Antártico bajo el hielo es muy similar a los otros continentes. La existencia de minerales valiosos no debería ser significativamente diferente en la Antártida a la de los otros seis continentes. El descubrimiento de depósitos de carbón con fósiles de la era Pérmica cerca del Polo Sur confirma que la Antártida estaba cubierta con abundante vegetación hace 250 millones de años, antes de que Pangea se dividiera. Las mismas formas de vida estuvieron presentes aquí como en cualquier otra parte. En consecuencia, la posibilidad de encontrar petróleo en Antártida no puede ser descartada.

Así es como se vería la Antártida sin su capa de hielo. Sólo la mitad de sus 14 millones de km cuadrados se levanta sobre el nivel del mar. La cubierta de hielo varía entre 2000 y 3000 metros de espesor en la extensa parte este y excede los 4000 metros en el oeste donde su gran peso ha sumergido la tierra entre lo que aquí se ve como islas.

Todo este hielo se mueve lentamente hacia el mar. El hielo que se mueve hacia afuera a los mares de Weddell y Ross puede tener 1000 metros de grosor donde todavía está adherido al fondo del mar pero se derrite en la medida en que avanza formando un banco de hielo flotante que todavía tiene unos doscientos metros de espesor donde se rompe en inmensos pedazos para formar icebergs.

El agua fría densa del hielo derretido se sumerge rápidamente bajo el agua más caliente del fondo que se desplaza a la superficie para reemplazarla donde es enfriada y diluida sumergiéndose a su vez bajo el agua circundante de la superficie que es más caliente.

Debido a estas corrientes y más particularmente al ascenso a la superficie de agua profunda rica en fosfatos, nitratos y minerales, las turbulentas aguas de la superficie antártica, expuestas a largas horas de luz día en verano, producen enormes crecimientos de fitoplancton y floración de algas que forman la base de una cadena alimenticia altamente productiva en la que el krill (camarón antártico), es un intermediario central del cual se alimenta una amplia variedad de especies.

No obstante, la productividad biológica cae abruptamente cuando el sol está abajo o detrás del horizonte entre abril y julio. Entonces, el área de hielo flotante de la temporada fría se extiende a unos 100 km a la redonda del continente pero rara vez excede los tres metros y se derrite en octubre cuando la floración de algas da inicio a un nueva y frenética explosión de vida.

Este cuadro global se complica con los vientos. Los vientos circumpolares del oeste empujan constantemente cantidades masivas de agua de oeste a este alrededor de la Antártida hasta aproximadamente 40% de latitud. Sin embargo, más al sur, los vientos del este provocan una banda delgada de corrientes este-oeste cerca del continente en las inmediaciones de los mares de Weddell y Ross. Todo esto se complica más con los repentinos vientos catabáricos de aire frío pesado que se apresura a descender desde el centro del continente a 3000 metros hasta el nivel del mar, algunas veces con velocidades de 200 km/h.

¡Todo esto para decir que la Antártida no es definitivamente el lugar más hospitalario en la tierra para los humanos! Eso explica porqué la exploración de la Antártida comenzó tan tarde. Las fuentes sobre la exploración en la Antártida abundan así que solo haré un listado de los hitos principales.

- 1773 el británico James Cook alcanza la latitud 71°10’ sur. Fue el primero en cruzar el Círculo Antártico y en explorar el borde del área de hielo flotante.
- 1819 el ruso Bellingshausen trazó mapas de South Georgia y las islas South Sandwich, cruzó el círculo antártico dos veces.
- 1820 cazadores de focas de varias naciones avistaron las Islas South Shetlands y otras partes de la Península Antártica.
- 1823 el británico James Weddell explora el mar de Weddell y establece un nuevo record de latitud más al sur, 74° sur.
- 1838- 1843 el francés Dumont d’Urville descubrió parte de la Península Antártica y parte de la costa Antártica Este. El americano Charles Wilkes explora la costa de Wilkes Land. El británico James Clark Ross descubre el mar de Ross y alcanza un nuevo record de latitud de 78° sur.
- 1870- 1890 Balleneros noruegos, británicos, escoceses, belgas y alemanes exploran la Península Antártica.
- 1908 El británico Ernest Shackleton obtiene un nuevo record más al sur pero no logra alcanzar el Polo Sur. Regresó con muestras de carbón confirmando que la Antártida alguna vez había sido semitropical.
- 1911 El noruego Roald Amundsen llegó al polo el 14 de diciembre, regresó a salvo a su base el mes siguiente.
- 1912 El americano Scott llegó al polo el 17 de enero, 1912, cinco semanas después del noruego Amundsen. Scott y su grupo murieron en el viaje de regreso.
- 1915 El barco de Shackleton quedó atrapado por el hielo del mar de Weddell durante 10 meses antes de hundirse. Shackleton llegó a South Georgia en un salvavidas y regresó a salvar a sus hombres 3 meses después.
- 1929 Byrd vuela al Polo Sur y regresa desde el banco de hielo de Ross.

Los descubrimientos y la exploración condujeron a demandas territoriales por parte de los británicos alrededor de la península en 1908, alrededor del Banco de Hielo de Ross en 1923 (transferido a Nueva Zelanda) y sobre Antártica Este en 1933 (transferida a Australia). En 1924 Francia reclamó Adelie Land y en 1933 Noruega reclamó Queen Maud Land. En 1943, Argentina y Chile interpusieron demandas rivales sobre la península, ya reclamada por los británicos.

Estados Unidos no reconoce las demandas territoriales de estas siete naciones pero no hizo demandas para sí mismo; USA llegó tarde a la exploración de la Antártida pero debe decirse que ha desplegado más esfuerzos en investigación científica en la Antártida que los otros siete juntos.

Durante el Año Geofísico Internacional (AGI) en 1967, 5000 científicos y personal de veinte naciones llevaron a cabo investigación en geología, sismología, glaciología,oceanografía, meteorología y física de la atmósfera superior en 49 estaciones de investigación en Antártida. La cooperación entre estos científicos produjo la redacción del Tratado Antártico firmado por los siete países demandantes y finalmente por otros 36 estados, 27 de los cuales sólo con estado de asesores. El tratado elude el problema de las demandas pero establece importantes reglas excluyendo el uso militar de la Antártida y promoviendo la conservación y la investigación científica compartida. Este condujo a varias otras convenciones para la protección de la vida y el medio ambiente en la Antártida en 1972, 1980, 1991 y en 1994.

Esto suena casi demasiado bueno para ser verdad, como si la razón hubiera prevalecido sobre las ambiciones expansionistas y sobre la simple y llana codicia a la antigua. No he estudiado todos los siete estados demandantes pero le pregunté a la gente en las calles de Argentina y Chile si ellos pensaban que la Antártida debería convertirse en un "territorio común" manejada para el mejor interés de toda la humanidad. La reacción fue casi unánime en ambos países dando a conocer que la Antártica, o Antártida como los argentinos la llaman, es "una parte integral de nuestro territorio nacional que debería ser defendida hasta la muerte" por todos y cada uno de los verdaderos patriotas (de Argentina y de Chile). Sabemos donde están parados los británicos, ellos fueron a la guerra y sacrificaron vidas en 1965 no por los pastores de las Malvinas sino por la esperanza del potencial mineral o petrolero de la península (a no ser que fuera sólo para enaltecer el orgullo británico lo cual es aún más estúpido).

Por fortuna, es generalmente aceptado por los creyentes que los pingüinos no tienen almas. ¡Pueden imaginarse el lío que resultaría si los cristianos fundamentalistas americanos descubrieran que tienen la misión de traer la fe y la democracia a las focas y pingüinos de la Antártida! ¿Y que tan rico se volvería el establecimiento industrial-militar del ala derecha en el proceso?

Dejando las bromas a un lado, la probabilidad de encontrar petróleo en la Antártida no es desdeñable pero no ha sucedido todavía así que los pingüinos están a salvo por el momento. Sin embargo, serán molestados una y otra vez por turistas como yo atraídos por la increíble belleza de este continente perdido.

Uno de los primeros barcos en ofrecer cruceros a la Antártida para turistas, el Lindblad Explorer, estaba en puerto cuando visité Ushuaia en 1994. Lo observé atado en el muelle principal y me pregunté como sería seguirle los pasos (sic) a los grandes exploradores. Era un sueño fuera del alcance a 5000 dólares por la litera más barata.

Diez años más tarde, la competencia de los rompehielos rusos subempleados ha bajado el precio cerca de los 3500 $. Aún costoso, pero un magnífico presente para darme por mi cumpleaños número setenta.

El crucero en el M/V Orlova de Quark Expeditions, estaba perfectamente organizado y bien valía el precio. Tres grupos diferentes de profesionales, la tripulación del barco (rusa), el personal de servicios y el personal de la expedición velaban por la satisfacción de cada una de nuestras necesidades. La línea azul muestra nuestra ruta. Pasamos dos días cruzando el Paso de Drake en el trayecto hacia el sur, cinco días explorando las islas y el continente en zodiac y dos días más regresando a Ushuaia. Sinceramente puedo recomendar este crucero a todos aquellos que puedan pagarlo.

En realidad visité sólo una muy pequeña porción de la costa pero es técnicamente correcto decir que he estado en la Antártida y colorear todo el continente de amarillo como visitado una vez en mi mapa mundial de países visitados.