Cuando tuve que apresurarme hacia Ahmedabad para encontrarme con un ministro del gobierno de Gujarat, la forma más rápida de llegar allí era en un tren nocturno hasta Baroda y un carro arrendado con chofer desde allí hasta Ahmedabad.
En el camino, tomé esta colorida foto de una carreta tirada por un camello.
Ahmedabad se ve muy parecida a cualquier otra ciudad india atestada con una población de aproximadamente 3 millones de habitantes. La capital del estado de Gujarat en realidad está en Gandhinagar, una nueva ciudad administrativa, 30 km al noreste de aquí.
Fundada en 1411 por Ahmed Shah, Ahmedabad se convirtió en una de las ciudades más refinadas de la India en el siglo XVII pero ha estado decayendo desde entonces. Esta puerta de la ciudad y otras cuantas son todo lo que queda de los muros que la protegían durante su apogeo.
Me quedé en el confortable Hotel Cama en la costa oriental del río Sabarmati.
El Cama era un oasis de paz en medio de la ruidosa, sucia y olorosa Ahmedabad. Sus jardines tenían un sombreado cenador y una pequeña piscina.
Otro oasis de tranquilidad era la Mezquita de Rani Sipri construida en 1514 por una de las esposas del sultán Mehmood Begada.
Abajo, el mihrab (nicho sagrado) de la mezquita a la izquierda y su entrada a la derecha.
Las mezquitas pueden verse por todo el mundo pero el estado de Gujarat tiene el mayor número de templos Jain que son más escasos.
Después de mis reuniones de negocios, hice una corta visita al Templo Jain de Hetheesing de 1850 antes de volar a Nueva Delhi.
Los templos Jain son reconocidos por sus magníficas esculturas.
El Jainismo fue fundado alrededor el año 500 a.C. por Mahavira como reacción a la multiplicidad de dioses, el ritual elaborado y el poderoso sacerdocio del Hinduismo. Los Jains son ateos, crean que el Universo siempre ha existido y siempre existirá. Han conservado el concepto de la reencarnación pero no las implicaciones sociales de las castas en las que creen los hindúes. Los Jains pueden escoger el vivir como monjes o laicos pero no tienen sacerdotes ni rituales. Creen que la estricta observancia de los siguientes cinco principios puede liberarlos de la ruleta de la reencarnación.
Hay fuertes similitudes entre el Janismo y el Budismo original enseñado por Siddharta Gautama alrededor de la misma época, también como reacción en contra de los excesos del Hinduismo. Ninguno de los dos predica la existencia de un dios y ambos creen en el karma que conduce a las reencarnaciones de las cuales ambos procuran escapar.
Los Jains insisten en una muy estricta observancia de su ética y han seguido siendo pocos (menos de cuatro millones en el mundo con menos de 10 000 monjes y monjas).
El Budismo ha crecido hasta llegar a ser la cuarta religión más popular
en el mundo pero se ha desarrollado lejos de sus principios originales hacia tres
orientaciones substancialmente diferentes, el Budismo Therevada o Hinayana (vehículo
pequeño) de Sri Lanka, Tailandia y Myanmar, el Busdismo Tántrico o Lamaísta
del Tíbet y el Budismo Mahayana o vehículo grande de otras partes.