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El segundo día, el jefe de nuestra expedición organizó instrucciones de seguridad, un entrenamiento en bote salvavidas y conferencias sobre pájaros y plantas del Ártico para mantenernos ocupados entre las comidas mientras navegábamos todo el día hacia la ciudad de Ilulissat en la Bahía Disko.
Estos grandes chalecos salvavidas están garantizados para mantenerlo a flote indefinidamente pero no ofrecen protección contra el shock termal del mar Ártico apenas por encima de la temperatura de congelamiento.
Había algunos icebergs en el Estrecho de Davis pero eran menos espectaculares que los que había visto en la Antártida.
Los cielos nublados y una llovizna ocasional también se comparaban desfavorablemente con el tiempo soleado que había disfrutado en la Antártida.
Al tercer día llegamos al fiordo helado de Ilulissat de 70 km de largo en frente del glaciar Sermeq Kujalleq de 5 km de ancho. Ese glaciar avanza un promedio de 19 metros por día y produce 35 km cúbicos de icebergs cada año (el 10 % de los iceberg de Groenlandia)
Después del crucero descubrí que el fiordo helado de Ilulissat acababa de ser inscrito en la Lista de Herencia Mundial de la UNESCO de sitios naturales notables en julio, un mes antes de nuestra visita.
Después de desayunar temprano abordamos los zodiacs para visitar Ilulissat ( Los Icebergs), el lugar de nacimiento del famoso explorador ártico Knud Rasmussen.
Con 4000 personas y 6000 perros, Ilulissat es la tercera ciudad más grande
y uno de los principales destinos turísticos de Groenlandia. Tiene un moderno
aeropuerto y un importante terminal de ferry empleado tres veces a la semana desde
Nuuk, dos veces a la semana desde Qeqertarsuaq y una desde Uummannaq.
La mayoría de los cruceros usan el terminal de ferry pero nosotros desembarcamos de los zodiacs en estas rocas en el extremo de la ciudad.
Utilicélas posiciones equivocadas en mi primera cámara digital con el infortunado resultado de que todas mis fotos de Ilulissat quedaron sobrexpuestas.
Éste es el hospital de Ilulissat como se ve mirando al norte desde nuestro lugar de desembarco.
esta era la vista mirando al sur desde donde desembarcamos.
Nos transportaron en bus al viejo helipuerto desde donde la mayoría de los pasajeros se fueron a dar una caminata natural por la tundra.
Algunos de nosotros regresamos al pueblo, con la esperanza de conocer a los lugareños.
Hacía frío y estaba mojado cuando subí por la calle Edvard Siivertsenip con su hilera de casas de apartamentos cortavientos, todo el camino hasta...
...el centro de la comunidad de Ilulissat con un supermercado, almacenes, restaurantes y un banco. El lugar estaba desierto, probablemente debido al clima horroroso.
Finalmente me refugié en el Hotel Hvide Falk en el otro extremo de la misma calle. Traté de entablar conversación con el personal del hotel pero me parecieron reservados y no insistí.
Aquí está el Orlova, anclado entre los témpanos de hielo en la bahía.
Finalmente partimos a las 12:30, otra vez en zodiac desde la costa rocosa frente a la iglesia de Zion construida a gran costo para los fieles locales en 1782.
Después del almuerzo tuvimos una conferencia sobre hielo y una sobre ballenas mientras navegábamos al sur hacia Sisimiut.
En conjunto, había sido un día algo decepcionante para mí.
