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Es sorprendente encontrar esta grande y moderna ciudad de más de un millón de personas, tan lejos de cualquier otra cosa en la esquina suroeste de Australia. Las ciudades más cercanas del mismo tamaño son Adelaida a casi 2000 km. por avión, Melbourne (2750 km.), Jakarta (3000 km.) y Sydney (3250 km.).
El agradable clima que dura todo el año y que hace que la agricultura pueda llevarse a cabo en la esquina suroeste de Australia y el descubrimiento de las minas de oro tierra adentro, explica el crecimiento de Perth y del puerto cercano de Fremantle.
Este es el antiguo ayuntamiento en el centro de la ciudad.
Este es el moderno campanario erigido en el parque Esplanade entre el centro de la ciudad y los muelles en el río Swan.
Los viejos muelles en el lado sur de la ciudad, han sido transformados en una atracción turística con tiendas y restaurantes, y un embarcadero para transbordadores y cruceros.
La vía férrea divide a Perth en dos. El área norte de la vía llamada Northbridge es en donde está toda la acción de la vida nocturna.
Este es uno de los varios restaurantes de Northbridge en la esquina de Aberdeen y la calle William.
También en la calle William, en la esquina de la calle Francis, se encuentra uno de los más famosos hoteles, el Brass Monkey Hotel.
Un agradable crucero de 20 km. por el río Swan te lleva al tranquilo y relajado Fremantle. Aquí es indispensable disfrutar el tradicional pescado con papalinas en uno de los restaurantes alrededor del puerto de los pescadores.
La prisión rotunda, construida en 1831, es el edificio público más antiguo en Australia occidental. Las prisiones se encuentran prominentemente en la historia de Australia debido a que la mayoría de sus primeros establecimientos estaban construidos para aliviar la presión demográfica en Inglaterra, exiliando a los convictos.
El Museo Marítimo de Fremantle también exhibe reliquias del barco holandés Batavia que encalló en las islas en frente de Geraldton.
Aquí, en la esquina de la calle Collie y Marine Terrace, se encuentra un interesante ejemplo de la arquitectura colonial del siglo XIX.
Esta fotografía muestra la Iglesia Anglicana de St. John y el Ayuntamiento en la Plaza Kings en el centro de la ciudad.
Habiendo ido a Fremantle por transbordador, regresé a Perth por tren en esta estación, de la cual salí unos días después a la ciudad minera de Kalgoorlie.
La prisa del oro empezó en la cercana ciudad de Coolgardie en 1892 pero ese lugar decayó rápidamente cuando sus minas se agotaron.
Kalgoorlie inició un año después pero todavía es el más grande productor de oro en Australia.
Quite los carros, los semáforos y las calles pavimentadas para imaginarse las escandalosas escenas que este hotel debió haber visto cuando el polvo de oro era la forma de pago para calmar la sed y satisfacer los varios apetitos de los mineros.
Aquí está otro elegante hotel cuyo bar y salón de juegos hizo que la vida fuera soportable en los campos de oro en los días en que las aceras eran de madera y las calles de polvo.
El paisaje es escueto alrededor de Kalgoorlie pero está tachonado con armazones como éstas que se han dejado paradas aunque las minas que una vez fueron útiles, han sido abandonadas.
Me fui, con otros turistas, dentro de una de estas minas abandonadas nombradas en honor de Paddy Hannah quien descubrió oro en Kalgoorlie en 1893.
Era como un museo con lámparas de acetileno y martillos neumáticos antiguos.
La producción de oro de ahora viene mayormente de esta supermina mostrada en este fotomontaje hecha de tres fotografías.
Los elegantes hoteles con bares y salones de juegos son fundamentales para las ciudades mineras al igual que los prostíbulos que aún operan legalmente en Kalgoorlie.
Este, el Burdel Langtrees en la calle Hay, ofrece un completo rango de servicios, empezando en US$100 por 15 minutos, que están convenientemente enumerados en una gran cartelera justo adentro, en la entrada.
El Red House no es tan famoso como el Langrees pero también está abierto para los negocios cada noche.
La Questa Casa, más abajo la escalera de calidad, tiene un pizarrón en donde anuncian especiales cuando la clientela está baja.
Kalgoorlie fue divertida pero cruzar el desierto Nularbor fue una experiencia que no me quería perder. Cruzarlo en un camello o en un 4x4 hubiera sido más emocionante pero me conformé en hacerlo por tren.
El tren Indian Pacific toma 31 horas para cubrir los 2200 km. hacia Adelaida.
