El tabaco se cultiva en muchos países tropicales y los cigarros se manufacturan alrrededor del mundo, pero "Cubanos" y "Habanos" están reconocidos universalmente como los máximos sellos en calidad en cigarros. Asi es como se ve un campo de tabaco a través de la ventanilla de un micro en movimiento.
La Avenida Martí es la avenida principal de Piñar del Río. La capital de Piñar del Rio provincia que produce más del 80% del tabaco cubano. Casi todos los cigarros cubanos son, de todas maneras, manufacturados en La Habana, así como los sellos que se conviertieron en sinónimo del producto, como decir "Frigidaire" es sinonimo de "heladera".
Piñar, como es comunmente llamada, es una ciudad pequeña, de unos 150.000 habitantes, a 190 kms al oeste de La Habana. La "Catedral de San Rosendo" es uno de los paisajes que la distinguen.
Otro paisaje característico es este placentero paseo en la cercana Avenida Colón.
El estilo de vida es relajado acá y la gente parece ser mucho más
feliz que en La Habana. La gente que conocí en la calle hablaron libremente
de su vida cotidiana, sobre sus ingresos y sobre el costo de vida y sobre sus esperanzas
para sus hijos. Todos aquellos que conocí, estaban orgullosos de los progresos
logrados desde la revolución, sin quejarse como algunos de los que conocí
en La Habana o en Santiago.
La comida es barata en Cuba, este vendedor callejero está vendiendo tomates en forma privada por 12 centavos de dólar EU la libra, mucho más que los precios subsidiados de las tiendas del estado.
Los salarios son bajos en Cuba, pero los precios de la canasta familiar son igualmente de bajos, la educación y los servicios de salud son gratis y los alquileres casi gratis.
La economía del peso estaba bastante bien equilibrada y el pueblo era feliz
de vivir en este entorno, hasta que el turismo introdujo una nueva economía,
la del dólar, que subió todo.
Las tiendas del estado no son muy atractivas, pero ofrecen todo para las necesidades básicas a precios increíblemente bajos y subsidiados.
Las cantidades por cliente son racionadas para prevenir el abuso, pero estas
tiendas se aseguran que nadie se vaya con hambre a su cama, aún el más
pobre de los trabajadores del campo.
El Piñar del Río tiene su hotel de turismo, el Hotel de Piñar del Río, pero la corrupta influencia del turismo no es tan evidente en ciudades pequeñas como lo es en La Habana y Santiago.
Después de El Piñar volví a La Habana por otra semana, antes de cruzar la isla rumbo a Santiago con paradas en Trinidad y Camagüey.
El tabaco es importante en Cuba, pero la caña es el sustento principal de la economía cubana. Es la pérdida del precio premium del azúcar cubano en el mercado soviético, lo que inició la crisis económica que golpeara este país a principio de los 90, pero es el embargo de E.U. el que la amplificó y obligó a Cuba a recurrir al turismo para sobrevivir.
¡Trinidad es una joya!. Es uno de los pueblos pequeños más hermosas que he visto.¡Y he visto muchísimos!. ¡No es por nada que la UNESCO la calificara como Lugar de Patrimonio Mundial!.
Este pueblo de 50.000 personas, es también uno de los más viejos de Cuba, habiendo sido fundado en 1514.¡ hace casi cuatro siglos!.
La vida es tranquila en una tarde de domingo en Trinidad.
Trinidad es encantadora y la gente sigue siendo amistosa con los extranjeros, a pesar del creciente número de turistas que viene acá.
De alguna manera, Trinidad me recuerda a Antigua de Guatemala, que también
está calificada como Lugar de Patrimonio Mundial por la UNESCO. Antigua es
también hermosa, pero alberga tres docenas de colegios de habla hispana y está
llena de extranjeros aprendiendo español (la mayoría son norte americanos).
Actualmente no es un muy buen lugar para aprender español, porque por la noche
se habla mucho inglés en todos los bares y restaurantes.
La gente que vive aquí podría hacer un poco más de dinero
si tuviera tres docenas de colegios hispanos y tantos restaurantes y bares como tiene
Antigua, pero pienso que perderían algo de la calidad de vida que se evidencia
aquí.
¿No es amorosa esta calle curva en la parte antigua del pueblo?
A esta altura, ustedes se deben estar preguntando porqué yo, un turista, puedo ser tan tendencioso en contra del turismo. Reconozco mi tendencia, pero sólo en contra del excesivo turismo. Creo que un poco de turismo puede ser beneficioso para el país, porque trae nuevas divisas solidas y le abre la mente a la poblacion local a otros valores que no sean los tradicionales.
Sin embargo, en mi opinión, hay un nivel de saturacion turística,
donde estos beneficios comienzan a ser ensombrecidos por aspectos negativos que he
observado en varios lugares alrrededor del mundo.
Sé que ésta es la calle Piro Guinart por el campanario que ahora es el "Museo Nacional de la Lucha Contra Bandidos".
Los aspectos negativos del turismo excesivo primero golpean al visitante extranjero que, para el huésped local, no es más que "un individuo interesante del cual se podría aprender algo", pero se convierte en "otro banco que camina para ser aliviado de su exceso de efectivo de la manera más eficiente".
La presencia de muchos turistas y una excesiva dependencia de lo que ellos gasten, puede tambien ser dañino para la cultura y la organizacion social de la población local. He encontrado que esto es particularmente real en muchos lugares, donde el crimen y la prostitución están directamente relacionadas a la presencia de turismo. He desarrollado un "Indice de saturación Turística (IST) ,en un intento de medir la importancia de la influencia turística en varios países.
Fue interesante descubrir que las islas del Caribe recogieron 13 de las 20 puntuaciones más altas en este índice, confirmando mi impresión que se han convertido en la región golpeada más fuertemente por el turismo en el mundo Cuba tiene un índice bajo de 0.01, como Canadá, pero el turismo (y la prostitución), están creciendo muy rápido y nadie sabe dónde estará este índice dentro de una década sí las prioridades desarroladas actualmente por gobierno cubano no cambien. ¿Ganará Cuba nuevamente el título de ser "el patio de juegos de las Américas", como era en la época de Batista?
Esta no es una catedral, es tan sólo la "Iglesia Parroquial de la Santísima Familia", frente a la Plaza Mayor, en la parte más antigua de Trinidad.
La dominante fe católica se quedó sin favores durante los últimos cuarenta años. Eso permitió el resurgimiento de la previamente perseguida "Santería", religión practicada por los esclavos quienes disfrazaban sus ancestrales creencias africanas detrás de una fachada de elementos cristianos. Es ahora practicada abiertamente, aunque por pocos.
Resulta que entré a un lugar de Santería, no muy lejos de la Plaza Mayor y saqué las siguientes fotos del sacerdote de Santería con una Virgen Negra y de una santa o diosa de Santería. Fue bastante cándido conmigo al proclamar que ser un sacerdote de Santería era mejor profesión que la de doctor...
Este es el Ayuntamiento. Resulta ser que he estado en Trinidad el 28 de diciembre, y disfruté de la Fiesta del Día de la Liberación con la feliz población local.
Todo el mundo tenía una botella de ron y, hasta donde yo puedo decir, el ejercicio era el compartirla con la mayor cantidad posible de gente y así poder conseguir otra. Resultó ser una gran fiesta por la tarde.
Este grupo de escolares estaba pacientemente esperando su turno para cantar su
porción de obra en un esenario armado cerca al Parque Céspedes.
Por supuesto que había mucha música fuerte por todas partes. Del
otro lado del parque un grupo de chiquillos, algunos apenas preadolescentes, se esmeraban
en lograr verse mayores y sexys, mientras bailaban bajo la mirada entretenida de las
personas presentes.
Todo el pueblo estaba de gran fiesta y todos se iban poniendo felices y más
felices a medida que transcurría el día y los envases se iban vaciando.
Había puestos de sandwiches de cerdo prácticamente en todas las
esquinas, así nadie se iba con hambre. A propósito, el cerdo asado,
es el festin favorito de Cuba.
El cerdo asado es tan preferido que es natural para los cubanos pensar que ha dado
vuelta a Cristo también, aunque fuera judío.
He pasado bonitos momentos en Trinidad y les recomiendo que corran a conocerla, antes que los locales se hayan cansado de ver muchos turistas que no se tomen el tiempo para tener charlas significativas con los extraños.
Me quedé con una encantadora pareja joven, Javier Guerrero, un militante de la juventud comunista y su esposa Madelin Maceiro, una economista que renunció a su trabajo porque puede hacer mucho más dinero recibiendo a los turistas en su casa. Aprendí bastante sobre la corrupción de burócratas de bajo nivel y acerca del pillaje en fábricas del estado que alimenta el mercado negro.